Un toque retro en casa con suelo hidráulico

Hace unos días os hablaba de la reforma de un baño en la que estoy trabajando, concretamente en este post, y os comentaba que seguramente optaría por un suelo hidráulico, que es un tipo de pavimento que me gusta muchísimo. Por eso me gustaría hablar un poco más en profundidad de este tipo de suelo, para que os animéis a aportar un toque retro en casa con suelo hidráulico.

Este tipo de baldosas decorativas están fabricadas en cemento pigmentado, y son aptas para su uso en interior como en exterior. Comenzó a utilizarse en el sur de Francia a mediados del siglo XIX y se puso rápidamente muy de moda, siendo usado como pavimento habitual en las construcciones hasta los años 60 del siglo XX.

Las primeras referencias de este tipo de suelo son del año 1857 y se extendió muy deprisa como producto alternativo a la piedra natural debido al elevado precio del mármol en la época.

La coincidencia de la creación de esta técnica con el auge del modernismo hizo que los diseños fueran cada vez más más complejos y artísticos, de manera que los fabricantes trabajaban con los diseñadores y arquitectos de moda para crear sus modelos.

Incluso Antonio Gaudí diseñó un único pavimento, creado inicialmente para la Casa Batlló pero que finalmente se colocó en la Casa Milá y que en la actualidad pavimenta las aceras del Paseo de Gracia de Barcelona.

La medida más habitual en el suelo hidráulico son las baldosas de 20 x20 centímetros, creadas con diseños geométricos, florales o vegetales muy coloridos, para ser instaladas en el suelo simulando alfombras. Aunque también quedan de maravilla en paredes, como vemos en la foto de abajo…. 😉

Lo que más me gusta de este tipo de suelo, además de su aire vintage, es el protagonismo que adquiere en la estancia. Es de esos suelos que invitan a pararte a contemplarlo y no puedes pasar por alto. En mis recuerdos está muy ligado a la casa de mi abuela, en la que aún hay dibujos que siguen estando ahí, en las diversas estancias, y que estamos recuperando año tras año.

Mi recomendación es que no tapéis este suelo si lo tenéis en casa y lo hagáis parte importante de la decoración de las habitaciones. Han sido muchos los suelos hidráulicos que me he encontrado escondidos en alguna reforma y los hemos vuelto a poner en valor, recuperando auténticas maravillas.

Si os gusta la mezcla de estilos en la decoración, os animo a sacar partido al suelo hidráulico, que consigue unos resultados increíbles en cualquier estancia de la casa, como hemos visto en las imágenes que compartimos en el post.

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